Elaborado por Marcia Rodríguez, investigadora del Grupo de Investigación en Área Temática de Empresas Familiares de la Escuela de Negocios del Tec de Monterrey.
Hoy en día, las prácticas responsables de las empresas han tomado un auge importante. De forma particular, las pymes enfrentan un contexto altamente competitivo. Si bien son generalmente cruciales en la economía de los países, en México son un pilar socioeconómico fundamental, al representar casi una mayoría absoluta que contribuye de forma significativa a la generación de empleo y al producto interno bruto.
¿Cómo una pyme -cuyos recursos son limitados- que busca sobrevivir, puede incorporar prácticas responsables en sus negocios? ¿Es suficiente cambiar de forma de pensar para enfrentar desafíos actuales?
Una filosofía cuyo auge va en crecimiento es el Capitalismo Consciente, propuesto por John Mackey y Raj Sisodia. Esta puede influir positivamente en la reputación de estas empresas mexicanas: apuesta por un enfoque más allá de la maximización de los beneficios económicos de las organizaciones, de forma que creen valor a todas sus partes interesadas, no solamente accionistas o dueños, sino para sus colaboradores, clientes y la comunidad en general.
El Capitalismo Consciente tiene cuatro pilares centrales: propósito superior, integración de los grupos de interés, liderazgo consciente y cultura consciente.
El primer pilar, el propósito superior, implica que una empresa tenga una razón más allá de las utilidades, de forma que aproveche su capacidad para ofrecer prosperidad y bienestar a las personas.
El segundo pilar, la cultura consciente, se basa en construir una cultura organizacional sólida que considera valores éticos y tener transparencia, con lo que se fortalecen los lazos internos y externos de la empresa.
El tercer pilar es la integración de los grupos de interés. Cabe señalar que el concepto de grupos de interés o stakeholders se refiere a todas aquellas personas internas o externas a la organización, o comunidad en general, que se ven afectadas positiva o negativamente por la actividad que aquella realiza. Este pilar se enfoca en forjar relaciones positivas con todos los stakeholders de cada organización.
Por último, el cuarto pilar es el liderazgo consciente. Un líder consciente se esmera en impactar de forma positiva a su entorno; inspira a sus colaboradores a cumplir el propósito superior, para construir un negocio y una comunidad próspera.
Algunas empresas que han adoptado esta filosofía son Costco y Starbucks. Costco tiene una misión clara: “ofrecer, a nuestros socios, la mejor calidad en cada producto y servicio que ofertamos al más bajo precio posible”. Una de sus principales premisas es enfocarse en sus colaboradores. En lugar de ofrecer salarios reducidos, paga por encima del promedio del mercado, brinda beneficios para empleados de tiempo parcial y completo, y además ofrece contribuciones significativas para la jubilación. Los empleados logran una mejor satisfacción y su retención es más alta: más del 60% de su fuerza laboral suma más de cinco años de servicio.
Starbucks, por su parte, tiene la misión de “inspirar y nutrir el espíritu humano. Una persona, una taza de café y una comunidad a la vez”. La empresa valora la diversidad de sus colaboradores, no solamente en términos de género, raza, etnia, orientación sexual, discapacidad, religión y edad, sino también en sus antecedentes culturales y experiencias de vida. Desde su fundación, Starbucks ha promovido la inclusión y la diversidad. Esto se refleja en la incorporación de más de 100 trabajadores adultos mayores y 37 personas con discapacidad intelectual que han decidido continuar su trayectoria laboral en sus tiendas en México.
Aunque estas empresas son grandes, la filosofía para ser una empresa consciente se origina con un cambio de mentalidad. El Capitalismo Consciente puede ayudar a que las pymes alineen sus metas organizacionales a través de valores éticos, con objetivos no solamente económicos sino sociales, que brinden bienestar dentro y fuera de la empresa. Al incorporar prácticas empresariales conscientes, las pymes tendrán una herramienta poderosa para contribuir al bienestar de la sociedad, cuya retribución será aumentar la confianza y la percepción positiva de sus stakeholders.
Publicado originalmente en Expansión.